Alexa, ¡cuéntame un cuento!

Qué maravilla de tiempos estamos viviendo, con tecnología abriendo puertas y ventanas para todas las personas con algún tipo de discapacidad. Ya sabemos que nuestros peques (y no tan peques) con el síndrome de Rett pueden aprender a comunicarse a través de un comunicador dinámico. Pero hoy queremos dar un pasito más allá y hablar del control de otras tecnologías, como Alexa, vía el mismo comunicador de nuestra hija o hijo.

¿Qué es Alexa?

Alexa es el asistente virtual controlado por voz, creado por Amazon y lanzado junto a su línea de altavoces inteligentes como Echo Dot, Echo Spot o Echo Plus.

El funcionamiento de Alexa es muy simple: empiezas invocándolo diciendo su nombre (Alexa), y siguiendo con un comando con tu voz. Alexa reconocerá lo que le pides y te dará una respuesta.

Pues ahora, cuando nuestr@s niñ@s ya tienen su voz, pueden interactuar con Alexa a través de su comunicador dinámico y poner su música favorita, pedir un cuento o incluso controlar otros elementos conectados a Alexa, como por ejemplo las luces de Navidad. Todo esto les permitirá ser más autónomos y tomar sus propias decisiones.

Seguro que os preguntaréis ¿cómo funciona esto con un comunicador dinámico?

Pues hay varias cuadrículas ya hechas para manejar Alexa, pero suelen ser demasiado complicadas para nuestros usuarios. Por eso, primero lo que tendremos que hacer es crear en su comunicador dinámico una página con los mensajes que pedirán a Alexa.

Unos ejemplos de mensajes pueden ser:

  • “Alexa, pon música de …….”
  • “Alexa, enciende la luz”
  • “Alexa, cuéntame un cuento”
  • “Alexa, léeme el libro …”

Además, no podemos olvidar unas funciones básicas como subir o bajar el volumen, pasar a la siguiente canción o parar.

Tendremos que conectar el dispositivo a internet a través de la aplicación Alexa. Y en caso de que quieran encender algún dispositivo de hogar, como, por ejemplo, luces, necesitaremos también un enchufe inteligente compatible con Alexa. Hay varios tutoriales de uso general de Alexa y estamos seguros de que los encontraréis con facilidad. Aquí solo queremos dar algunas ideas y consejos sobre su uso vía un comunicador dinámico y su adaptación al nivel de nuestr@s hij@s.

Cuando programemos las celdas del comunicador, es importante poner el texto de tal manera que haya una pequeña pausa después de palabra “Alexa”, ya que el dispositivo tarda un ratito en activarse y prepararse para escuchar el comando de voz. Por eso, es importante poner algún signo de puntuación en la frase o incluso añadir una pausa más prolongada si hiciera falta. Todo esto se experimenta con cada dispositivo, ya que la reacción de Alexa dependerá de su posición relativa al comunicador y el sonido producido por este. Os animamos a experimentar el funcionamiento antes de proponérselo a vuestr@ hij@, para asegurarse de que todo funcione correctamente y sea una experiencia agradable y motivadora.

Y por último, queremos a invitaros a estar abiertos a sus gustos y preferencias. Demasiadas veces nosotros limitamos su repertorio a canciones para niños que les gustaban desde pequeños y olvidamos que los gustos cambian con el tiempo. Es importante ofrecerles distintos tipos de música, cuentos o películas y preguntarles por su opinión, para conocer mejor sus gustos y dejar florecer su propia personalidad.

A continuación, os dejamos un vídeo de Emma (11 años) disfrutando con su Alexa.